10 Cosas Que Hacen Los Pobres Que Los Ricos NUNCA Hacen
Autor: Sebas Celis
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Para empezar, aquí me refiero a ricos y a pobres desde la perspectiva de mentalidad.
Mentalidad de abundancia, mentalidad de escasez o de pobreza.
No tanto de cuánto dinero tenemos en la cuenta bancaria, o en las inversiones, o cuántas casas tenemos, o cuánto hay en nuestra billetera; sino realmente cuál es nuestra capacidad de empezar de cero y crecer financieramente, transformar nuestra situación.
Hay personas que quedan en la quiebra y a los dos o tres años están mucho mejor que antes de haber quedado en la quiebra, por lo que no se trata de pobreza o riqueza financiera; no hablemos de pobres refiriéndonos al que gana X cantidad, no hablemos de ricos o los políticos.
Hablemos de personas verdaderamente ricas, quienes han creado su fortuna de forma honesta, quienes no salen en las noticias y no salen en las redes sociales, no aparecen en ninguna de esas cosas porque no hay controversia y no hay nada negativo que hablar sobre ellos.
Personas que ni siquiera creemos que existen, pero que las hay en todas partes, simplemente debido a su trabajo honesto, pueden crear abundancia proveyendo valor a la sociedad, a otras personas, o a otras empresas.
Así que, con eso dicho, vamos a empezar.
#1 Gastan El Dinero Que Aún No Han Recibido
Una cosa es que yo planee realmente «okey, con este dinero voy a hacer tal cosa«.
Otra cosa es que, en el momento en que llegue ese dinero, ya se fue, ya tiene un destino particular; y muy probablemente entre todos los destinos que el dinero que no he recibido ya tiene, yo no estoy en esa lista de prioridades, cuando realmente la filosofía de riqueza es «yo me pago a mí primero«…
Priorizo el ahorro, priorizo la inversión y priorizo invertir en mí mismo; pero el pobre ya le tiene patas a cada billete.
#2 La Mayoría De Sus Compras Las Hacen De Forma Emocional
A veces por aparentar compran ropa de marca, o zapatos de marca, cuando realmente no es necesario.
Y muchas veces esto de querer aparentar, o querer encajar en la sociedad de alguna forma, o de mostrarle a las personas, o que cuando una persona obtiene un aumento, y fíjate que estoy hablando de alguien que obtiene un aumento, lo que hace con su nuevo ingreso es gastar más, comprar una nueva camioneta, comprarse una casa más grande para que lo vean; eso no necesariamente es riqueza…
Eso es un manejo emocional, y es una necesidad de aprobación por parte de los demás, lo cual forma parte de una clara mentalidad de escasez.
#3 Se Gastan Todo El Dinero Que Reciben, No Ahorran
Y estamos hablando tanto de los que ganan menos del salario mínimo, como los que ganan más del salario mínimo.
No importan cuánto reciban, nunca es suficiente para ahorrar ni siquiera el 1%.
Y seamos sinceros, cualquier nivel de ingreso me debería poder permitir ahorrar así sea una moneda, pero es que ni una moneda se ahorran.
Más fácil se la gastan en la calle en cualquier cosa, y al momento de analizar después de varios años de trabajo ¿qué tienen? No tienen nada.
Mientras que los ricos saben y conocen el poder de cada centavo, y saben que el Diablo está en los detalles, por lo que no dejan pasar la oportunidad de ahorrar algo de dinero.
Y por eso muchas personas con mentalidad de pobreza los ven como tacaños o mezquinos, simplemente porque conocen el valor a largo plazo del dinero y no dan por sentado ninguna cantidad.
#4 Se Conforman Con Una Sola Entrada De Dinero
Siempre están pensando: «pero es que es imposible crear más«, «pero qué hago«, «pero es que no me queda tiempo para crear una segunda fuente de ingresos«.
Las excusas o las justificaciones de porqué yo no gano más dinero, «es que la situación está muy dura«, «es que no hay oportunidades«, «es que en este mundo sencillamente a uno no le queda tiempo«, «no tiene las habilidades«, «no tiene las capacidades«, «en Colombia no se puede«, «en México no se puede«; esto, lo otro, o lo otro.
Mientras que la mentalidad de abundancia es siempre «yo puedo tener más tiempo libre«, «yo puedo dedicar mi tiempo a esto«, «yo puedo priorizar«, «levantarme una hora antes en la mañana y leer 45 minutos, estudiar, aprender, educarme, formarme«, adquirir habilidades que me permitan monetizarlas en los momentos libres fuera del trabajo, si lo estoy utilizando como un mecanismo de apalancamiento temporal para luego desarrollar, ya sea mis propios negocios u obtener realmente un empleo que me permita generar más ingresos y empezar a construir mis ahorros y mi patrimonio como tal.
Dejar todas esas excusas y empezar a encargarme de mis finanzas.
#5 Viven Pegados De Las Noticias Y Un Entorno Negativo Alrededor Del Dinero
Aunque en teoría se supone que «saben» lo que pasa en el mundo, en el pueblo, en el país; realmente no saben nada, no tienen idea de cómo funcionan las cosas a nivel financiero; cuáles son las oportunidades que surgen.
Por eso no pueden ver con claridad y con anticipación qué decisiones tomar, cómo aprovechar las oportunidades subyacentes; las que no son tan claras para todo el mundo, y por el contrario es como que la ola llega y se los lleva por delante sin que siquiera se den cuenta qué diablos pasó.
Puede sonar un poco duro, pero estar enfocando tanto ese negativismo, lo único que hace es que se quejen, que culpen a otros y que esperen que llegue Superman a salvarles las vidas.
#6 No Conocen Las Matemáticas Financieras Más Básicas
La matemática con lo cual ellos podrían hacer las cuentas, tomar una decisión, comprar esto en vez de esto otro; decidir este en vez de otro banco.
Adquirir crédito de vivienda con esta tasa o con esta otra tasa, teniendo en cuenta los seguros y calculando realmente la tasa efectiva.
Y en últimas sabiendo el valor de comprar, por ejemplo, un vehículo nuevo vs uno usado; el usado puede salir con muchos problemas, el nuevo te va a costar mucho más, poner en la balanza diferentes cosas, y casi siempre todas estas decisiones son tomadas a la ligera; son tomadas por sensación, por lo que yo creo que está bien.
Y ellos quieren ser muy buenos con el dinero pero no dedican nada a afilar su capacidad de mejorar financieramente.
Quieren ser buenos en algo que no practican, que no estudian y que no se educan para mejorar.
#7 Al Adquirir Una Deuda Solamente Se Basan En Cuánto Queda La Cuota Mensual
No les preocupa cuánto van a pagar en total.
Cuando analizamos un crédito hipotecario 20 años, incluso con la mejor tasa en el mercado, nos terminamos dando cuenta que pagamos el doble o más del doble de lo que nos prestan; y lo mismo puede pasar con una compra con tarjeta de crédito:
Cuando se compran el iPhone a 12 o a 24 cuotas, terminan pagando un 50% más, un 30% más del precio original, que a veces incluso ya de por sí está inflado fuera de que tiene el impuesto, importación y muchas otras cosas.
No analizan no solo qué otras alternativas hay de comprar esas cosas más económicas, sino que piensan: «okey, me queda muy fácil la cuota de X cantidad de dinero mensual«, no hay ningún problema.
Tanto ellos como los ricos si analizan sus gastos al año, se van a dar cuenta que ahí es donde se elevan.
Yo podría incluso correlacionar esto con el gasto de compras de supermercado.
Hay gente que compra las presentaciones más pequeñas de los productos porque son más baratas, pero cuando nos vamos a precio por gramo, o precio por kilo, realmente sale mucho más económico comprar en cantidad siempre y cuando no se nos vayan a dañar las cosas, sino que realmente podamos balancear el reducir el costo por unidad de producto.
Lo mismo aplica con las deudas, y cuando ponemos algo en cuotas y no analizamos sino el monto a pagar, ni siquiera vemos la tasa, ni siquiera vemos cuántos intereses son, ni si realmente nos están cobrando lo que nos dijeron, que no suban y cobren más porque los bancos son una belleza para eso; no es una sorpresa que muchos estén en situaciones complicadas y que después terminen culpando esas entidades por sus malas decisiones.
#8 Creen Que Saben De Dinero
Hay una curva que explica muy interesantemente el hecho de uno conocer y dominar un tema.
Inicialmente cuando uno empieza a aprender, uno siente que ya sabe, que ya domina el tema, que ya es experto prácticamente.
Conforme uno más aprende, más estudia y más se educa, uno empieza a decir «esto tiene mucho más de lo que yo pensé«, y empieza a sentirse mucho más ignorante, cada vez a sentirse menos, y menos, y menos conocedor del tema; al punto en que uno cree que no hay forma humana posible de dominar el tema en absoluto.
Y de pronto si uno sigue estudiando, aprendiendo y practicando más y más, ya va adquiriendo la confianza.
Los pobres se tienen mucha confianza en que manejan el dinero de la mejor manera posible, y realmente no lo hacen.
Nunca tienen esa capacidad de buscar ayuda, de asesorarse, de preguntar o de admitir que tienen un problema o una dificultad con ese manejo y con esa administración.
Si tú le dices a una persona de estas que está manejando mal su dinero, es como si le lastimaras su ego; y no se trata de ego, se trata de nuestra situación financiera y la importancia que esta tiene para determinar nuestro propio destino.
#9 Creen En Promesas Fantasiosas
Esperan ganarse la lotería, son fácilmente víctimas de esquemas piramidales, o el amigo que les propone el negocio maravilloso.
Básicamente están listos para eso, como si pudieran lograr mucha abundancia financiera con cero esfuerzo sin hacer absolutamente nada, especialmente sin tener que educarse, ni transformarse, ni cambiar de hábitos, ni hacer cosas que no están dispuesto a hacer, ni dejar de lado ciertas conductas que definitivamente no contribuyen positivamente como ya los hemos hablado antes.
Si hubiera esa píldora mágica ellos serían felices, suponiendo que eso les brinde mucha riqueza, y claramente los estafadores saben esto y se aprovechan.
#10 Le Dejan Toda La Responsabilidad A Los Demás
A los gobiernos, quienes deberían subir el salario mínimo cuando ya hay gente que está ganando 10, 20, 30 salarios mínimos por su propia cuenta, sin que el gobierno haya tenido que hacer absolutamente nada.
No es culpa del gobierno, es culpa de ellos que quizás no buscan maneras diferentes, inteligentes, no se educan, no buscan contactos, no se mueven para hacer algo realmente diferente por sus vidas.
Y estoy hablando de gente que incluso tiene acceso a internet, lo cual en cuanto a pobreza financiera, podríamos decir que no son pobres porque tener acceso a internet ya es riqueza, si lo comparamos con muchos países, pero es pobreza de mentalidad como te estaba diciendo.
Y no es para denigrar a nadie, pero nadie se va a encargar de tu vida.
Los gobiernos no se van a encargar de tu bienestar, los bancos no se van a encargar.
Ya vimos en 2020 qué pasó con los «alivios financieros», no aliviaron a absolutamente a nadie.
Nadie va a venir a solucionar los problemas por ti, así que eres tú quien te debes encargar de ese bienestar financiero.
Los pobres por el contrario, esperan que llegue quién sabe quién a rescatarlos; esperan que el nuevo presidente, que el nuevo alcalde, que la nueva reforma, o quién sabe qué cosa, sea lo que realmente les brinde esa nueva situación financiera positiva que tanto necesitan.
Ellos no se dan cuenta que la solución está aquí, dentro de ellos, en sus propias mentes; y todo empieza por un cambio de mentalidad que realmente se da desde una convicción de yo poder crear abundancia independientemente del entorno en el que me encuentro, desde el punto de partida que inicia, e independientemente de cuáles sean mis ambiciones y mis deseos en la vida.
En general, las personas con una mentalidad de pobreza se dejan detener por un obstáculo así sea pequeñito.
Siempre esa mentalidad de escasez me dice que yo no puedo.
Todo es un problema, todo es una limitación, todo es un impedimento y esto es algo por lo cual ellos dejan de tener metas (si es que en algún momento las han tenido), o simplemente consideran que podrán tenerlas, pero que no valen la pena; incluso llegan a confundir ambición con avaricia, lo cual no tiene absolutamente nada que ver lo uno con lo otro.
Cuando tú te das cuenta que el dinero es un recurso como cualquier otro, como por ejemplo un martillo, lo puedes utilizar para construir una casa o para romperle la cabeza a alguien; te das cuenta también que el dinero en las manos correctas puede hacer grandes cosas.
Depende de ti decidir si tus manos son las correctas o no.
Si a ti te da miedo tener mucho dinero, es porque seguramente tienes esa inseguridad respecto a cómo tú manejarías un recurso tan poderoso; pero si confías en que tú con ese dinero puedes crear abundancia, puedes ser generoso, puedes ser feliz, puedes realmente ayudar a otras personas, contribuir con valor y muchas otras cosas, verdaderamente tiene en tus manos la capacidad de transformar tu vida para vivir mucho más abundantemente.
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