7 Buenos Hábitos Que Si Implementas, Transformarán Tu Vida
Autor: Sebas Celis
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Es un hecho…
Tener buenos hábitos en la vida y llevarlos a cabo todos los días, es como poner en piloto automático el éxito y el triunfo en todos los objetivos que tengas.
La mejor característica de los hábitos, y por lo cual es lo que necesitas para garantizar buenos resultados, es que una vez que los interiorizas, empiezas a realizarlos automáticamente y sin pensarlo.
Y claro, es un arma de doble filo porque si no eres consciente de tener un hábito dañino o destructivo, igualmente lo estarás realizándolo todos los días, sin pensarlo.
Así que, vamos a ver 7 buenos hábitos que puedes implementar fácilmente, desde hoy 🙂
Hábito #1: Planea Descansos Frecuentes
Muchas personas creen que descansar es negativo, o piensan que tomarse unas vacaciones cada mes, así sea pequeñas y en la misma ciudad, es de vagos o es de perezosos… Y realmente no es así.
Las personas más exitosas del mundo, incluso grandes empresarios, tienen siempre planeado con anticipación un tiempo en el que solamente van a dedicarse a descansar; la mayoría de ellos incluso aprovechan para desconectarse del mundo:
No tener acceso a internet, no tener teléfono, no recibir llamadas, ni siquiera tener contacto con nada que tenga que ver con negocios… Solamente descansar.
Y eso es algo que tú también puedes implementar, en mayor o menor medida, pero que de alguna manera u otra, descanses por completo.
Hábito #2: Aprende Algo Nuevo Cada Día
Hoy en día es muy sencillo, ya que puedes aprender con un artículo como este, en donde tú dedicas entre 5 y 10 minutos diarios máximos y todos los días puedes conocer y descubrir un nuevo concepto, una nueva estrategia, una nueva técnica…
Algo que alimente tu cerebro y que lo actualice para que no se quede todo el tiempo estático y con las mismas cosas que ya sabe.
De esta manera, incluso tu memoria mejora, porque en todo momento estás moviendo tu maquinaria cerebral, y ello te lleva indudablemente al éxito, ya que puedes crear mejores ideas y convertir todos tus conocimiento en resultados.
Hábito #3: Abandona La Multi-Tarea
O en otras palabras, dedícate siempre a una sola cosa a la vez.
A muchas personas nos gusta creer que somos buenos para hacer de todo al mismo tiempo (sobre todo a las mujeres); sin embargo, está comprobado científicamente que prácticamente nadie en el mundo lo puede lograr…
Si te dedicas a dos cosas al tiempo, lo más probable es que ambas estén hechas con una calidad mucho menor, o que una de ellas esté casi totalmente desatendida y sea tu cerebro el que te de la ilusión de que lo estás haciendo bien.
Cuando nos dedicamos completamente enfocados a una sola cosa, nuestras probabilidades de que los resultados en esa cosa aumenten, mejoren y la calidad sea muchísimo mayor, obviamente van a aumentar… Esas probabilidades prácticamente se van a disparar.
Hábito #4: Ten Una Rutina Nocturna
Diferentes personas tienen diferentes rutinas, dependiendo de la hora en que se acuesten y el tipo de actividades que realizan; por eso la idea es que tú definas tu propia rutina.
Por ejemplo, algunas personas leen un libro en las noches, antes de dormir… A mí particularmente no me gusta llenar mi cabeza de ideas y conceptos antes de irme a dormir, porque lo más probable es que no duerma pensando en todo lo que aprendo.
Es claro que todos somos diferentes y todos podemos llevarlo a cabo de una manera distinta.
Otra rutina que se puede tener en las noches, es fijarse los objetivos o las metas del día siguiente, anotar en un papel y organizar un horario de actividades…
De esta manera, cuando nos levantemos, ya vamos a tener exactamente claro, cosa por cosa, qué es lo que vamos a hacer y no vamos a desviarnos.
Hábito #5: Ten Una Rutina Diurna
Ya que hablamos de la rutina nocturna, también es bueno tener un rutina de actividades programada para el día.
Y es importante que no sólo sepamos qué tipo de actividades van a llenar nuestra mañana, sino también cómo las vamos a desempeñar, qué hacemos primero.
Si por ejemplo vamos a tomar una ducha o a hacer ejercicio, o a tomar el desayuno y posteriormente vamos a leer, o vamos a estudiar, o vamos a ver un video (cosa que no recomiendo porque puedes distraerte en muchas otras cosas y terminar viendo videos de risa o lo que sea).
En todo caso, la idea es tener claro un plan o rutina.
¿Por qué? Porque es muy fácil caer en distracciones, puede haber imprevistos, puede que tú empieces con cierta cosa que consideres que es productiva o importante y termines en otra que no tiene absolutamente nada qué ver.
Aparte de eso, con un rutina tu mente se adopta y se programa para desempeñarse cada vez mejor en las actividades.
Hábito #6: Bebe Más Agua
El agua es prácticamente el componente principal de nuestros cuerpos y lo necesitamos en todo momento, no sólo para estar bien y sentirnos bien, sino incluso para evitar enfermedades…
La gran mayoría de casos de dolor de cabeza, se deben a deshidratación común; y esto solamente se resuelve tomando un poquito más de agua.
Tomar agua, y no gaseosas u otras cosas que contengan agua, sino agua sola y preferiblemente agua purificada.
Es algo que trae muchísimos beneficios a nuestro cuerpo, que oxigena nuestra sangre, que beneficia nuestro cerebro, entre muchas cosas más.
Incluso hay una manera de calcular cuántos vasos de agua idealmente deberías tomar en el día, según tu peso… Entonces es algo a lo que puedes echarle un vistazo.
Hábito #7: Ve Acorde A Tu Cuerpo
Casi siempre, como seres humanos, tratamos de ir en contra de lo que nuestro cuerpo nos dice… Por ejemplo, si en algún momento tenemos sueño pero tenemos una responsabilidad, pues no dormimos.
Algunos que son mejores en la noche para ser productivos, o lo que llaman «búhos nocturnos» (como yo); prefieren forzarse a madrugar e ir en contra de su naturaleza, para terminar siendo improductivos y lidiando con la pereza y el desánimo…
Todo por el paradigma de «dormir en la noche y madrugar a trabajar».
El caso es conocer tu cuerpo, conocer de qué manera funcionas al máximo, cuáles son esos picos o puntos de productividad a lo largo del día; y empezar a hacerle caso a tu cuerpo, a ir acorde y no en contra de eso que tu cuerpo te dice.
Obviamente esto no significa dormir y hacer pereza todo el día, con la excusa de que «es lo que tu cuerpo te pide»…
Sino por el contrario, aprovechar y apalancarte en tus niveles de vitalidad y energía, para que en esos momentos sea en donde más puedas producir excelentes resultados.
Así que, no te dejes llevar por las «reglas» de la sociedad: Busca lo que más te convenga a ti y al logro de tu éxito.
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