7 Comportamientos «De Adulto» Que Te Hacen PERDER Dinero
Autor: Sebas Celis
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Cuando transicionamos de nuestra adolescencia a nuestra vida de adultos, muchas cosas cambian; especialmente respecto a la manera en que manejamos el dinero.
Adoptamos ciertos comportamientos o conductas que se suponen que son de adultos, o que son cosas que «deberíamos hacer» con nuestra finanzas; y muchas de ellas, realmente nos llevan a perder dinero.
#1 Salir Con Los Amigos Cada 8 Días
Especialmente si es de rumba o es a beber.
Y realmente no es que esté mal salir con los amigos… Pero pasan dos cosas:
- Que adoptamos una vida donde entre semana no disfrutamos ninguna actividad, prácticamente todo es trabajo. No compartimos con amigos en ese tiempo. Y eso nos lleva a querer gastar más el fin de semana, como una manera de desahogarnos por haber pasado todos esos días aburridos.
- Que cuando tenemos el mal hábito de gastar por gastar, se nos vuelve una presión social el gastar dinero; y cada 8 días entonces si no gastamos, si no bebemos, si no salimos a cenar, se interpreta como que no estamos compartiendo, ni siendo buenos amigos… No estamos «fortaleciendo» esa relación de amistad.
Entonces, de alguna u otra manera eso es ligar algo negativo y tóxico, a lo que se supone que es algo positivo y que debería brindarnos bienestar a nosotros y a las personas que nos rodean.
Por supuesto está perfectamente bien salir con amigos, disfrutar, incluso tomar trago de vez en cuando no es nada malo (obviamente todo con moderación)…
Pero a nivel financiero, hay personas que simplemente se dejan llevar, y esto les afecta brutalmente, sin darse cuenta.
#2 Salir A Cenar En Restaurantes o a Tomar Un Café
O lo mismo: beber en algún lugar.
Porque muchas de estas cosas las podemos conseguir en supermercados.
Por ejemplo, una botella de alcohol de cierto trago especial, la podemos conseguir en el supermercado a un precio; y cuando la bebemos en un lugar elegante, en un restaurante o bar, simplemente tienen un margen del 50%, hasta el 70% hacia arriba.
Y claro, no estamos pagando solo el producto, también estamos pagando la experiencia.
Pero cada quien decide qué es lo que vale la pena pagar, cada cuánto, y con qué frecuencia.
Aplica lo mismo para los alimentos, que a veces podemos cocinarlos en casa. No siempre, ya que a veces es una ocasión especial que queremos celebrar.
Y el café si es algo que para muchos se convierte en un hábito de todos los días, y definitivamente es uno que podríamos facilitar, optimizar, simplificar, reducir, simplemente preparándolo en casa.
De hecho, si somos amantes al café, hasta podríamos ahorrar e invertir en una buena cafetera que sabemos que vamos a darle el uso suficiente para compensar y aprovechar todas esas salidas a comprar café especial por fuera.
El caso es que te mencionaba que puede ser un poco aburrido, porque mucha gente dice «entonces no puedo gastar, no puedo disfrutar, no puedo hacer nada con mi dinero. Me esfuerzo tanto, para eso lo gano, para eso trabajo, y nunca voy a poder hacer nada porque todo peso que recibo tengo que guardarlo«.
No. No se trata de eso.
Se trata de EQUILIBRIO en la vida.
Estos simplemente son hábitos que hacen que muchas personas gasten más de lo necesario, más de lo debido, más de lo razonable.
Ahí está el punto: Razonables.
Si tú gastas en un punto razonable; es decir, si disfrutas pero NO te excedes… Ahí es donde puedes estar en control de tus finanzas, y aún así poder disfrutar los frutos de tu trabajo.
Todo esto depende de tu nivel de ingresos.
Por supuesto si ganas $10.000 dólares al mes y te vas a gastar $500 dólares en salidas, o $800 dólares en salidas ($200 dólares cada fin de semana), pues no llegará ni al 10% de gastos en diversión con tus amigos en total en el mes, de acuerdo a tus ingresos.
Entonces para ti seguramente está bien, si eso es lo que ganas.
Pero cada persona, de acuerdo a lo que gana, sabrá si la proporción de gastos que está teniendo en este momento, está bien o no está tan bien.
#3 No Negociar Los Precios
Ya sea los precios ante una empresa de telefonía por ejemplo; o al momento de salir a comprar algo en el centro, o en cualquier lugar.
Simplemente, que porque ya somos adultos, ya tenemos dinero, podemos pagar las cosas y sería «mal vistos» que busquemos negociar.
Y claro, a veces no es posible negociar y a veces los precios de ciertos lugares son fijos; y si no tienes el dinero, pues ni modo…
Pero, en muchas ocasiones es posible negociar, hasta el salario que te pagan en un empleo que estás a punto de conseguir, se puede.
Prácticamente todo se puede negociar en la vida.
Pero por un lado, no nos enseñaron a hacerlo; y por otro lado, nos da pena pedir una rebaja.
#4 Gastar De Más En Vacaciones
O cuando viajamos y paseamos.
Igual que pasa entre semana cuando yo de lunes a viernes vivo una vida relativamente aburrida, y el fin de semana me desato a gastar y a disfrutar, y a desahogarme y recompensarme por esos días en los que no me divertí…
Así mismo prácticamente pasa todo el año, en el que yo no salí de la ciudad, no hice mayor cosa y quiero desatarme a gastar y a disfrutar cuando tengo mis vacaciones.
Pero esto me puede llevar a problemas financieros graves.
A muchas personas las lleva a endeudarse, y a gastar realmente mucho más de lo que tenían pensado.
Y si tienen tarjetas de crédito y no tienen cuidado de cuál es su presupuesto, peor todavía.
Y aquí también muchas personas dicen: «pero es que yo no quiero ir a viajar y pensar en que tengo que estar restringido, a tener un límite diario«… Por esa misma razón muchas personas deciden pagar un paquete -todo incluido-, o algo así para que no tengan ninguna preocupación.
Lo cual, habría que ver si es más económico o no, o es más costoso en algunos casos.
Y dependiendo de cuál es tu mentalidad a la hora de pasear, quizás para ti sea mejor ir sin preocupaciones, o ir teniendo el control, sabiendo que no te vas a salir de un presupuesto.
En cualquier caso, es evidente que la gran mayoría de las personas, gastan más de lo que quisieran, más de lo que deberían y más de lo que es razonable en vacaciones, simplemente porque sí.
Y muchas veces ese gastar de más, no significa ni representa que DISFRUTEN más.
Porque disfrutar no es directamente proporcional a gastar, en todas las ocasiones.
#5 Dedicarse A Pagar Deudas Sin Tener Un Ahorro Para Imprevistos O Fondo De Emergencias
Claro, hay que priorizar el pago de deudas.
Como adultos, una conducta saludable y sana, es pagar las deudas si las tenemos.
Pero ¿qué pasa si llega un gasto imprevisto que sencillamente no tenías pensado que llegara?
Pues en ese momento, si ya abonaste lo que tenías de dinero a tu deuda, vas a tener que volverte a endeudar.
Los expertos que asesoran ejecutivos y empresarios, recomiendan que incluso las empresas tengan una reserva de dinero, en caso de que surja algún gasto imprevisto.
Y la pandemia nos enseñó a todos, que a pesar de que siempre demos por sentado que las cosas van a estar igual, que tenemos cierto nivel de seguridad percibida y demás; realmente todo puede cambiar de un momento a otro.
Por lo que la idea es tener un equilibro entre ahorrar, pagar deudas, invertir; y siempre mantener una reserva de dinero en caso de que algo surja.
#6 Comprar Productos En Packs
O paquetes de más de 1 unidad, supuestamente para buscar un ahorro, pero terminar no usándolos, que se venzan y tener que tirarlos a la basura.
Yo creo que prácticamente todos en algún punto de nuestras vidas hemos sido culpables de esto.
Muchas veces se trata de analizar nuestros hábitos, nuestro consumo y demás, para evitar caer en este error.
Porque las empresas saben que si nos vemos tentados a comprar solamente buscando la economía, vamos a terminar gastando más dinero.
Ya depende de nosotros si realmente aprovechamos el gastar más con que se recompense, aprovechando esos productos de verdad; o si termina siendo un gasto innecesario de nuestra parte, en cuyo caso debemos replantearnos la forma en que compramos.
Porque puede que para algunos productos valga más la pena pagar más por miligramo, más por mililitro, o más por unidad; pero que no se nos venza lo que compremos.
Para ciertas cosas esto quizás no aplique de la misma manera, como por ejemplo servilletas o papel higiénico, que puede pasar un buen tiempo y aún así el producto está bien (dentro de lo razonable, por supuesto).
Pero para productos perecederos, hay que ser muy cuidadosos.
#7 Darle La Máxima Prioridad A Comprar Una Casa
Que, junto con el estudio formal, y el que «no eres persona» a menos que tengas un título universitario; son dos de las ideas que más están implantadas en nuestra mente latina.
Simplemente como algo que si no logramos en nuestra vida, no hicimos nada, no fuimos nadie, fuimos completamente fracasados.
Esto hace que muchas personas para poder lograr esos objetivos y sentir que son alguien en la vida, se endeuden o simplemente se ahorquen financieramente de unas maneras increíbles, que incluso luego los lleva a problemas financieros, a no poder pagar, a quedar reportados en centrales de riesgo.
E incluso muchas veces a quedarse sin casa, por no haber decidido iniciar el proceso de inversión en casa propia, en EL MOMENTO adecuado.
Porque una casa puede ser una buena inversión, pero quizás no para todo el mundo y no en todo momento, dependiendo de sus finanzas.
Hay que ser muy inteligente al hacerlo, ya que es un gasto muy grande; y también pensar si la casa es para ya vivir, o para rentarla, en cuyo caso la dinámica de rentabilidad es muy diferente.
El caso es que cuando como adultos, pensamos que la casa lo es todo; que tener un techo es la tranquilidad, es lo único que nos queda en la vida, y muchas otras cosas que nos meten en la cabeza desde niños…
Pues, nos estamos dejando llevar para tomar una decisión supremamente importante, sin siquiera analizar si de verdad es algo que queremos.
Muchas personas incluso quieren viajar por el mundo, conocer otros lugares; y están amarrados a una casa que todavía deben y que la van a seguir pagando durante 1 década o incluso más.
Hay que ser muy objetivo y pensar muy bien, antes de cada decisión; especialmente de una tan grande.
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