7 Señales De Que Mereces Un Trabajo Mejor
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Una persona promedio cambia varias veces de trabajo a lo largo de su vida, y este número de cambios ha aumentado recientemente.
Anteriormente era muy probable tener el mismo trabajo, toda la vida.
Hoy en día es normal que estemos cambiando.
Y en algún momento llega un punto en el decimos «¿será que necesito o merezco un empleo mejor?».
En este post te quiero contar 7 señales que te lo dejan perfectamente claro.
Señal #1: Tu Rol No Está Evolucionando
Eso de que tienes «más experiencia», solamente significa más y más años trabajando en la misma cosa.
Esto significa que estás prácticamente estancado, y que a pesar de que trabajas y trabajas duro, tu sueldo definitivamente sigue siendo el mismo.
Y por si fuera poco, no se aprecia realmente el esfuerzo y el tiempo que estás dedicando.
En ese caso, es claro que mereces algo mejor.
Señal #2 :El Flujo De Trabajo No Es Intuitivo, No Es Motivante Y Por El Contrario, Es Confuso
Probablemente tengas una carga laboral demasiado pesada para ti, y tengas que estar esperando constantemente entregas de otras personas, o que otras personas te aprueben o te respondan, o algo así para poder continuar, y que se formen «cuellos de botella».
Cuando esto ocurre, significa que la empresa probablemente no tiene muy bien estructurados los flujos de trabajo, esos manuales de funciones y actividades.
Y esto es importante de parte de un líder o jefe, determinarlo muy bien para que el trabajo sea, no sólo apto para cada persona, sino auto-motivante.
Y si no lo es, la empresa definitivamente está destinada a fracasar tarde o temprano.
Porque los empleados son parte vital y son el núcleo de una compañía. Son los que permiten que la compañía logre sus objetivos.
Si ellos no están contentos, o no entienden su trabajo, y las métricas que tienen son demasiado difíciles de lograr a menos que se estén matando todo el tiempo, trabajando durísimo para conseguirlo, y aún así el pago es el mismo a pesar de su esfuerzo…
Pues, considero yo que debe haber mejores empresas, que eso sí lo tengan bien estructurado.
Señal #3: Te Llevas El Trabajo Para La Casa
Ahora que estamos hablando de teletrabajo, trabajo desde casa, idealmente hay que cumplir con un horario laboral; y después de ese horario laboral, nada de recibir llamadas, de estar redactando informes, nada de decir que el fin de semana me estoy dedicando al trabajo si es que no me están pagando dominicales, horas extra, o cosas por el estilo.
Porque muchos jefes quieren exigir más de lo que sus empleados deben estar dispuestos a dar.
Y solamente el empleado por el temor de perder su trabajo, asume cargas que no le corresponden y que están por fuera de su alcance.
Ahora, está bien que algunos empleados no son lo suficientemente eficientes para cumplir en el tiempo que tienen y que pueden dentro de su horario laboral, las actividades y los objetivos planteados.
Si, hay mucha gente que sencillamente aunque podría trabajar y ser más productiva, y dentro de su horario laboral cumplir, no lo está siendo.
Pero seamos honestos: Nos daremos cuenta que en muchas compañías se le pone al empleado más carga de la que debería, y se le paga menos de lo que se debería.
En ese caso, debes ser consciente de que hay muchas más ofertas laborales, y que no tienes porqué aceptar esta situación de la compañía en la que estás.
Señal #4: Constantemente Tienes Los Mismos Inconvenientes
No hay cambios, no hay flexibilidad, no hay formas de reestructurar, y cuando planteas una idea, no le dan validez.
Muchas veces incluso hay que asumir actividades de otros cargos, solamente porque la empresa no tiene suficientes empleados contratados para cumplir las labores de manera correcta.
Son empresas tan arcaicas, que diseñaron los parámetros hace tiempos y hoy en día dicen «eso es lo que se va a hacer, así se va a hacer«, nunca han cambiado, no se actualizan y la empresa que no es flexible, se va quedando atrás.
Señal #5: Entorno De Trabajo Tóxico
Ya sea que tus colegas sean chismosos y estén hablando todo el tiempo cosas pesadas, malucas y te hagan sentir mal; o un jefe que definitivamente no te trate de forma correcta, te trate de forma abusiva; o cualquier otra situación que haga que en el trabajo verdaderamente te estés sintiendo bastante mal.
Esto puede llevar incluso a problemas o dificultades a nivel psicológico, y muchas veces a nivel psiquiátrico, por lo que verdaderamente es importante que esto esté bien.
Un entorno tóxico de trabajo no es algo que deberíamos aceptar sólo por el hecho de que podemos ganar un sueldo a cambio.
Señal #6: Sientes Que Tus Ideas Nunca Son Importantes
Es más, a la basta mayoría de empleados se les ocurren ideas de cómo podrían mejorar la situación de la empresa, de cómo podrían tener procesos alternativos, de cómo podrían resolver ciertos problemas, y nunca las mencionan.
¿Por qué? Porque ni les prestan atención, ni les ponen cuidado, ni las toman en consideración para mejorar.
A veces ni siquiera tienen en cuenta las opiniones de los clientes, la satisfacción al cliente; ahora mucho menos la de sus empleados.
Si a ti te valoran tus ideas, tus aportes, tus contribuciones, realmente te das cuenta que la empresa valora lo que haces porque estás aportando y contribuyendo con que esa empresa logre sus objetivos.
Pero si no, piénsalo muy bien.
Señal #7: Estás Emocionalmente Atado A Tu Trabajo
Si tu trabajo no va muy bien, si no estás logrando tus objetivos o tus métricas, si hay problemas o dificultades, incluso cuando no son tu culpa, entonces te sientes mal y eso se traslada a otras áreas de tu vida.
Eso no está bien.
O si por el contrario te estás viendo bien en el trabajo, de repente todo está bien para ti.
Es estar ligado y atado, y ser prácticamente co-dependiente de tu relación con tu empleo y con tu cargo laboral, lo cual realmente no está bien.
En este caso debes mejorar tu inteligencia emocional, si analizas que el problema nace en ti mismo, o incluso ayuda psicológica si es el caso; pero debes tomar acción para desligarte emocionalmente del punto tóxico en que podrías estar atado a tu empleo.
O, hay trabajos que definitivamente te hacen sufrir, y ese sufrimiento se traslada a muchas otras áreas de tu vida, y en ese punto debes replantearte que mereces y necesitas algo mejor.
Por supuesto no se trata de que los empleadores te traten como un rey, te den cantidades de beneficios y sencillamente no te pidan nada a cambio…
Se trata de una relación en que ambas partes ganen, ambas partes obtengan lo justo, y que realmente lo que tú hagas aporte, beneficie y sea de valor para la compañía; pero que tú también obtengas ese valor, ese bienestar y sea apreciado tu esfuerzo y tu trabajo.
Ya si en algún momento te sientes cansado de todo este asunto, de lo que es trabajar para conseguir el objetivo de otro, pues piensa en emprender, en trabajar para ti mismo, en ser tu propio jefe.
También tendrás muchísimos retos y dificultades, pero al mismo tiempo una gran satisfacción de manejar tu propio negocio en base a tus principios, de trabajar por tus propios resultados y crecimiento, en fin.
No es fácil, pero es bastante posible y muy reconfortante.