Cómo Acabar Con El Desorden Y Simplificar Tu Vida
Cómo Acabar Con El Desorden Y Simplificar Tu Vida
A veces alcanzar el estado más simple posible, puede convertirse en algo sumamente complejo.
Por ejemplo, diseñar una página web simple, es bastante difícil. Organizar la casa de manera que sólo esté lo esencial y no haya cosas de más que no se usen, de igual manera requiere bastante esfuerzo.
La cuestión es que, normalmente y según nuestra psicología humana, el desorden en el entorno que nos rodea, es una clara señal de que algo no anda bien en nuestra vida.
Por alguna u otra razón tendemos a ser en el exterior como somos en el interior. Una persona en paz consigo misma y que de verdad tiene organización personal, muy probablemente tienda a ser más ordenada con sus cosas.
Pero no te preocupes, pues hay algo bueno en todo esto, y es el hecho de que si empiezas a cambiar lo que reflejas en el exterior, tu mente subconsciente empezará a adaptarse a los cambios e internamente y en poco tiempo te habrás transformado.
Ventajas De Acabar Con El Desorden
Una vida con menos desorden hace más fácil que puedas encontrar tu paz interior, enfocarte en lo que es verdaderamente importante y mantener tu atención sin distraerte en las interrupciones vagas que conlleva vivir en el mundo de hoy.
El desorden crea distracción. Es sabido que genera estrés y confusión en nuestra mente y lo peor de todo, no nos damos cuenta de ello.
Sin embargo, una vez has acabado con el desorden, usualmente una sensación de calma y de estar «más liviano» llega a tu vida. Eres capaz de pensar con más claridad y de resolver problemas.
Limpiar y ordenar un escritorio o algún tipo de espacio en tu vida en donde pases gran parte de tu tiempo, puede ser una experiencia inesperadamente positiva. Y está demostrado que es algo que te beneficia tanto emocional como mentalmente.
Esta es la razón por la cual es importante para mí acabar con el desorden. Pero también hay otras ventajas, como por ejemplo liberar espacio y en muchos casos ahorrar tiempo y dinero.
Conozco personas que tienen la casa llena de cosas innecesarias, tales como adornos, cuadros en la pared, miles de porta-retratos, etc. Todo esto contribuye, no sólo a tener que haber invertido dinero en ello, sino a tener que incluirse en el aseo general de la casa.
En otras palabras: Más cosas que limpiar.
Ahora, está bien la decoración de interiores, algunos simplemente no pueden vivir sin elementos que los hagan sentir «más humanos». Pero, ¿De verdad necesitan muñecos de porcelana para llenar el alma y satisfacer al espíritu?
Cuando no hay cosas innecesarias en tu vida, y en tu casa, es mucho más fácil (y da menos pereza) pensar en organizar y limpiar constantemente. Incluso si tienes a alguien que te ayude en esta parte, verás resultados más duraderos.
Empieza Hoy Con Algo
La idea entonces, es que no te quedes sólo con la teoría, sino que pases a la aplicación, por lo cual me gustaría brindarte algunas ideas que personalmente aplico en mi vida:
Primero, toma un cajón o escritorio. Vacíalo por completo y coloca todas las cosas en otro lugar.
Posteriormente, saca el cajón o escritorio y limpia el lugar donde quedará nuevamente. Limpia el escritorio o cajón vacío y colócalo en su lugar.
Finalmente, empieza a tomar todas las cosas que estaban allí, y revisa una tomando 3 posibles decisiones según sea el caso:
1. Decidir botar a la basura el elemento: Para esto, puedes tener lista una bolsa de basura. Esto debe hacerse con cosas que sabes que no utilizarás, por más que tu mente trate te buscar excusas para dejarlas contigo.
2. Decidir regalar el elemento: Puede que no te llame la atención botar algo, ya sea por su valor o porque realmente puede servirle a alguien más. Por ejemplo, libros que ya hayas leído, ropa que no te sirva o no te guste, e incluso cuadernos que tengan sólo algunas páginas llenas (a muchos les sería útil para tomar notas, etc). Aquí es importante tener en cuenta que hablamos de REGALAR y no de prestar. La idea es deshacerte de todo lo que realmente no necesitas.
3. Decidir reubicar el elemento: Puede que el elemento en cuestión no valga la pena botarlo a la basura ni tampoco regalarlo, pero, ¿En serio debe ir en ese cajón? ¿Qué tal una nueva ubicación? A veces las cosas con cambiarlas de sitio liberan espacio y dejan orden.
4. Poner el elemento en periodo de prueba: Una muy buena práctica en caso de que no sepas si el elemento lo usarás o no en el futuro, es tener una «Caja de los 6 meses». En caso de que no sepas que hacer con algo, colócalo en esta caja y colócale con un papel o cinta al objeto la fecha en que lo colocaste allí. La cuestión es sencilla: Si no has usado algo en el pasado, probablemente no lo uses en el futuro.
Entonces, si resulta que un día realmente necesitas tomar algo de dicha caja, sólo fíjate en la fecha y mira si no han pasado 6 meses. Y cada cierto tiempo con lo que superó el tiempo de prueba, debes aplicar el paso 1 ó 2 según sea necesario. Si necesitaste dicho elemento antes de los 6 meses, quizás quieras pensar en aplicar el paso 3.
¡Y eso es todo! Es un simple ejercicio que puedes llevar a cabo en 5 ó 10 minutos y que te permitirá mejorar tu vida profundamente.
No tienes que hacerlo con toda tu casa a la vez, quizás si empiezas hoy con el lugar que más frecuentas ya empieces a notar el cambio en tu vida. Posteriormente puedes ir procediendo a otros lugares de tu casa y en poco tiempo vivirás una vida más minimalista, calmada, organizada y sinceramente, serás mucho más productivo.