Cómo Dejar De Ser Tímido Y Superar La Timidez
Cómo Dejar De Ser Tímido Y Superar La Timidez
Es increíble a veces la manera en que nos comportamos.
Vivimos en un mundo, en el que criticar a las personas y enfocarse en los atributos negativos de la gente, parece ser la regla.
Este es un aspecto desafortunado de la vida, y muchas personas (incluso ya de adultos) tienen problemas con su autoconfianza y seguridad en sí mismo.
También es triste, que esas mismas personas se pierdan de tantas oportunidades que tiene la vida para ellos, sólo por no creer lo suficiente en sí mismos, o no pensar en que merecen lo mejor.
Todo comienza contigo mismo. Dejar la timidez es un proceso que debes llevar a cabo en tu interior, y por supuesto, no hay recetas mágicas ni píldoras milagrosas… No hay nada que puedas hacer para superar tu ansiedad social de la noche a la mañana.
Si buscas ese tipo de cosas, este no es el lugar adecuado. Y probablemente, ninguno lo sea, pues no se conoce ningún método rápido para superar éste tipo de dificultades.
Habiendo dicho eso, pasemos a mencionar algunas recomendaciones que pueden facilitarte la vida si quieres crear confianza en ti mismo y superar la timidez.
Vuélvete Bueno En Algo
A veces, es sólo necesario un poco de talento. Llevar a cabo un hobby, o refinar un talento puede obrar maravillas para tu vida y tu autoconfianza. Si la gente empieza a ver de lo que eres capaz, te lo empezarán a hacer saber, e inconscientemente tu autoimagen mejorará.
Mantén Un Diario
¿Sabes quién es la persona que más te va a criticar durante toda tu vida? Tú mismo.
Sin embargo, no tiene por que ser así. Si decides escribir en un diario o agenda tus logros, o aquellas cosas que te hacen feliz, tu mente se adapta rápidamente a la idea de que de alguna manera u otra, vales la pena.
La vida es maravillosa, y es una dicha poder disfrutarla, recuérdale eso a tu mente 😉
Mantente En Forma
Realizar ejercicio y comer de forma saludable te hace sentir mejor, eso ya no es un secreto. Cuando te das cuenta qué tan bien luces y qué tan saludable estás, no hay razones para ocultarte de otras personas.
Gran parte de la timidez en la gente proviene de sentirse mal consigo mismos, en el aspecto físico, así que si empiezas a mejorar esta parte, tendrás mucho terreno ganado.
Cuídate A Ti Mismo E Independízate
Dedícate con mayor frecuencia a aquello que te guste. Si nadie quiere ver esa extraña película contigo, o escuchar esa loca canción, hazlo solo, y no pienses que eres un perdedor por ello, simplemente cuestión de gustos.
Sé independiente y no trates de buscar la aprobación de nadie, cuida tu cuerpo y tu apariencia, pero no lo hagas por los demás, hazlo por ti. No trates de agradarle a alguien, o de verte bien para que aquella chica (o chico) que te gusta, te hable.
Ser independiente y no necesitar la compañía de nadie, es una fortaleza, no una debilidad.
Vuélvete Más Optimista
No tiene sentido enfocarse en las nubes grises, e ignorar el hermoso arcoiris. Buscar ideas positivas y verle el lado bueno a las cosas, puede afectar tu actitud y estado de ánimo enormemente y para bien.
Dedícate a analizar las cosas buenas que la vida tiene para ti. Por ejemplo, tienes una conexión a Internet cuando muchos no tienen siquiera agua potable. Tienes un lugar para dormir con tranquilidad, cuando algunos andan huyendo y llenos de preocupaciones.
Tienes mucho por lo cual agradecer, y muchas cosas buenas aguardan por ti en el futuro, debes saber eso y tener altas expectativas con optimismo (por supuesto, enfocándote no sólo en pensar positivo, sino también en actuar proactivo).
Dedícate Tiempo A Ti Mismo
Debes pasar tiempo solo… pero no mucho.
Todos deberíamos sacar una parte del día para dedicarla a nosotros mismos. Leer un libro, o disfrutar del frío de la noche (dependiendo donde vivas, claro). Pasar buenos ratos sin hacer nada más que pensar, y comunicarte contigo, a través del Diálogo Interno.
Ten en cuenta eso sí, que no deberías pasar mucho tiempo solo, date unas pequeñas dosis «soportables» de tu presencia y posteriormente dedícate a tus quehaceres cotidianos.
Fíjate Metas Alcanzables Al Principio
Uno de los problemas más grandes de las personas tímidas, es que a veces se fijan metas imposibles. Como por ejemplo, un adolescente querer ser el centro de atracción o convertirse en una persona popular en su escuela en poco tiempo.
Es mucho más fácil que simplemente te fijes como objetivo, sonreír a 2 personas, o saludar a 3. Empieza pequeño, con cosas que de verdad sean fáciles para ti, y luego ve avanzando de nivel.
Considéralo algo similar al levantamiento de pesas. Recién llegado al gimnasio, no vas a querer levantar 200 kilogramos en sentadillas.
Si quieres perder peso, empieza por algo sencillo, y fácil de lograr, como bajar 1 Kilogramo en 1 mes.
Y así, para todo lo que hagas en tu vida. En poco tiempo notarás las increíbles mejorías que estarás viviendo.
¿A Quién Realmente Le Importa Lo Que Otros Piensen?
Es muy difícil desconectarse de la opinión ajena, sin embargo es quizás una de las mejores cosas que puedes hacer.
La opinión de los demás, aunque no siempre con intención, suele lastimar mucho y ser de las peores influencias para la autoconfianza y el optimismo.
Por lo regular las personas no te dirán cuando notan algo positivo en ti… Pero ven algo negativo, y te llegan torrentes de opiniones no solicitadas.
¿La solución?
¡A quién le importa lo que piensen los demás!
En serio, ¿De verdad vale la pena? Hay más de 7 mil millones de personas en el planeta, ¿Te importa lo que piensen algunos pocos?
No debería.
En vez de eso, deberías…
Amarte A Ti Mismo
Sólo hay una persona, cuyas opiniones sobre ti mismo son importantes… Y esa persona eres tú.
Lo que tú opines sobre ti, si importa, ya sean cosas buenas, o malas. Así que analízate, verifica si estás lastimándote con tus propios pensamientos y ámate un poco más.
Cuídate, trátate bien, no te digas «¡Soy un idiota!» ni en broma, y dale un espacio a tu corazón para tu propia persona. Antes de querer amar a otros, y antes de querer ser amado, debes amarte y ser amado por ti mismo, y no es que sea arrogancia o egoísmo, es algo necesario para el crecimiento personal.