Cosas Que No Voy A Comprar En 2025
Autor: Sebas Celis
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¡Hola! Este año me he propuesto un cambio radical en la manera en la que gasto mi dinero. Sabemos que todos aprendemos cosas nuevas, pero siempre hay espacio para mejorar, especialmente cuando hablamos de finanzas personales.
A lo largo del tiempo, me he dado cuenta de que ciertos gastos, aunque pequeños, se van acumulando y terminan impactando de manera significativa mi economía.
Así que, he decidido poner en práctica algunos cambios concretos que me permitirán optimizar mis gastos y tomar control de mi dinero. Hoy te cuento qué voy a hacer y cómo tú también puedes aplicar estos consejos para mejorar tu situación financiera. ¡Vamos allá!
1. Adiós a los domicilios costosos
El primero de mis grandes cambios es eliminar por completo el costo de los domicilios. Si bien en su momento tener suscripciones como Rappi Pro me parecían una ventaja, pronto me di cuenta de que, aunque no pagara la suscripción directamente, el costo oculto de los domicilios sigue sumando. Entre la tarifa de servicio, el impuesto y las propinas, se convierte en un gasto hormiga que se acumula rápidamente.
Además, aunque el año pasado me la pasé en cama debido a una operación de rodilla (¡otro cuento para otro día!), ya no tengo excusa. Este año, con mi salud recuperada, voy a planear mis compras y, si puedo, voy a ir personalmente a los supermercados y centros comerciales cercanos. Ya no voy a dejar que la comodidad de pedir comida a domicilio me cueste tanto.
2. Reducir suscripciones innecesarias
Otro gasto que he estado eliminando poco a poco son las suscripciones innecesarias, como Netflix, Amazon Prime, HBO, y tantas más. En algún momento, uno se da cuenta de que, aunque esté pagando algunas de estas suscripciones, no las uso tanto como pensaba. Terminas pagando varias cuentas y no puedes ver todo lo que quieres, porque siempre hay una película o serie que está en una plataforma distinta. ¿La solución? Optimizar mis suscripciones, unificar algunas con mi familia y ahorrar un buen dinero. De paso, aproveché para simplificar todo el caos de plataformas de streaming.
3. Asegurándome de comprar solo lo necesario en el supermercado
Uno de mis hábitos más costosos ha sido comprar cosas en el supermercado que no estaban en mi lista. La típica tentación de las golosinas, los productos en oferta o esos «caprichos» que a veces ni necesitas, pero que terminas comprando. Este año, me he comprometido a hacer mi lista de compras y seguirla al pie de la letra. La regla es clara: nada que no esté en la lista se compra.
Claro, si me olvido de algo realmente necesario, no hay problema, pero mi objetivo es evitar esas compras impulsivas que siempre terminan en artículos innecesarios.
4. Eliminando las golosinas y «snacks» innecesarios
Este punto también tiene mucho que ver con la salud y con mis finanzas. He notado que los gastos en golosinas o «snacks» se suman más de lo que uno cree. No solo es un gasto hormiga, sino que también tiene efectos negativos en la salud a largo plazo. Este año, he decidido eliminar las papitas, chocolates y demás del carrito de la compra. No se trata tanto de lo que me ahorro, sino de evitar hábitos que afectan mi bienestar físico. ¡Nada de dejarme llevar por el impulso!
5. Ahorros en gasolina: planificación estratégica
Otro gasto importante que me ha tocado ajustar es el de la gasolina. Aunque ya tengo identificadas las estaciones más económicas, el hecho de no planificar bien mis rutas o esperar hasta que el tanque esté casi vacío, genera costos adicionales. Este año, me comprometo a planificar mejor mis salidas, no solo para ahorrar en gasolina, sino también para evitar esos viajes innecesarios que terminan siendo otro gasto extra. Un poco de planificación puede ahorrarme mucho dinero al final del mes.
6. Compra estratégica de alimentos para mis gatitos
Como soy dueño de algunos gatitos, uno de mis compromisos es seguir comprando comida de buena calidad para ellos, pero con un enfoque más estratégico. Las tiendas de mascotas suelen tener grandes descuentos en ciertos productos, y con un poco de anticipación, puedo ahorrar mucho dinero comprando cuando los precios bajan. Los alimentos para mis gatos tienen una fecha de vencimiento bastante amplia, por lo que no es necesario comprar de forma constante. Ya sé cuándo esperar los descuentos y aprovecharlos para hacer compras a largo plazo. ¡Ahorro asegurado!
7. No más bebidas con azúcar
Finalmente, un cambio que también me beneficia a nivel de salud y de finanzas es eliminar las bebidas con azúcar de mi dieta. A pesar de lo ricas que puedan ser, las bebidas azucaradas no solo son malas para la salud, sino que representan un gasto que podría evitarse fácilmente. En lugar de comprar esas bebidas, voy a optar por opciones más saludables y económicas, y de paso, mejorar mi bienestar.
8. Evitar comprar accesorios de marca innecesarios
A veces, la tentación de adquirir accesorios de marca es fuerte, especialmente cuando uno quiere que todo en su vida tenga un toque premium. Sin embargo, no siempre vale la pena gastar tanto en artículos que no impactan directamente en tu seguridad o bienestar. Un claro ejemplo de esto son las plumillas de marca para mi carro.
Resulta que, por ejemplo, las plumillas de limpiaparabrisas que venden en Amazon, que son mucho más económicas, son mejores que las originales de Mercedes Benz, que me duran poco y no cumplen con la calidad esperada. Así que este año, he decidido ahorrar en esos detalles innecesarios. No voy a seguir pagando por accesorios de marca que no me ofrecen un beneficio real.
Lo único en lo que no escatimo es en elementos que realmente afectan mi seguridad, como las llantas de mi vehículo. En ese caso, la calidad no tiene precio porque es algo directamente relacionado con mi seguridad en la carretera.
Así que, para accesorios que no sean esenciales para mi seguridad o funcionamiento, evitaré las marcas premium y optaré por opciones que sean más accesibles y, en muchos casos, más funcionales.
Seguramente te preguntarás: ¿Por qué tanto esfuerzo por ahorrar unos cuantos pesos aquí y allá? La respuesta es sencilla: quiero poder invertir y hacer crecer mi dinero. Cuando reduces tus gastos innecesarios, puedes destinar más dinero a lo que realmente importa: tus objetivos financieros a largo plazo. Cada peso que ahorras es un paso más hacia un futuro más tranquilo y libre de estrés financiero.
Lo que quiero es contar con más capital para invertir, tomar control de mi economía y asegurarme de que cada peso que gaste o ahorre se utilice con inteligencia.
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