El Miedo Al Éxito Es Peor Que El Miedo Al Fracaso
El Miedo Al Éxito Es Peor Que El Miedo Al Fracaso
Algunas personas le temen al fracaso.
Y no es para menos, fracasar no tiene mucho de bueno (o al menos, así lo percibimos naturalmente como seres humanos).
Si bien es claro que de todo fracaso podemos tomar un aprendizaje, todos buscamos acercarnos al placer y alejarnos del dolor, y ciertamente, el fracaso puede traer consigo diferentes tipos de dolor.
Dolor psicológico, físico, y mental. Por ejemplo.
Entonces, es fácil ver por qué algunas personas no se atreven a empezar un proyecto, pues el riesgo percibido, hace que no hacer nada, parezca una mejor opción.
De ese tema hemos hablado antes aquí en mi blog (https://www.exitopersonal.com/como-superar-el-miedo-al-fracaso/). Y también hemos hablado sobre el temor al éxito como tal.
Sin embargo, algunas personas creen que temerle al fracaso puede ser peor que temerle al éxito. Incluso, me encuentro curioso que muchas personas no creen que uno pueda tenerle miedo al hecho de triunfar.
Ser exitoso, casi siempre es catalogado como sólo glamour y diversión, pero hay algo que pocos realmente entienden sobre el éxito:
Todo Éxito Tiene Consecuencias – Positivas Y Negativas
Así es, consecuencias.
Muchas personas, con sólo escuchar la palabra «éxito» piensan solamente en cosas positivas. Pero la verdad es que alcanzar nuestros objetivos y metas, puede atraer situaciones y circunstancias, a las cuales deberemos adaptarnos.
Y no todas son agradables.
Veamos un ejemplo:
Supongamos que una chica quiere adelgazar. Esta chica tiene aproximadamente 90 kilogramos de peso, y su meta es quedar en 65 kilogramos.
Pensemos por un momento en cuál sería el estilo de vida de una persona con este peso:
- Consumiría comida no muy saludable (pero quizás atractiva y deliciosa, como la comida chatarra).
- Tendría más afinidad para relacionarse con personas de similar contextura, al entenderse mejor.
- No haría normalmente ejercicio, ni tendría la fuerza de voluntad como para asistir a un gimnasio.
¿Qué tan fuerte crees que sería el deseo de esa persona por adelgazar?
Quizás mucho.
Sin embargo, piensa en que para poder cumplir su objetivo (y además mantenerlo, pues no basta adelgazar y ya, es importante también continuar siendo delgado), esta chica necesitaría empezar a comer cosas diferentes, más saludables y no tan atractivas o deliciosas.
Por otra parte, debería ir al gimnasio o establecer alguna rutina de ejercicios específica (sin esto, es posible pero mucho más difícil).
Y finalmente, luego de adelgazar, es posible que sus amigos y/o amigas, empiecen a verla con ojos de envidia, celos, o incluso decepción (por ser diferente a ellos ahora).
Es obvio que…
Triunfar Tiene Sus Consecuencias
Por más interesante que le parezca a la gente alcanzar sus sueños, la verdad es que muy pocos se ponen a pensar realmente en las implicaciones de realmente lograrlos.
Independientemente de los sueños y deseos que tengas, todos ellos traerán consecuencias para tu vida.
Algunas obviamente positivas, y otras, no tan obviamente negativas.
Piensa por un momento en qué es aquello que quieres lograr, y ten en cuenta lo siguiente para que puedas evitar el temor al éxito:
- Tu estilo de vida debe cambiar un poco para que tus sueños sean realidad. ¿Cómo podrías afrontar ese cambio?
- Habría cosas nuevas que deberías empezar a hacer, y cosas antiguas que deberías dejar de hacer. ¿Estarís dispuesto?
- … y por último, tu entorno se vería alterado de alguna manera, con lo que deberías tener la fortaleza para mantenerlo.
Para evitar el miedo al éxito, lo único que se necesita es conciencia. Conciencia sobre las implicaciones de actuar, de dejar de actuar, y de realizar cambios trascendentales.
Conciencia sobre el hecho de que vivir una mejor vida, implica cambiar rotundamente si lo que ahora vives día a día no es el éxito total.
Como dijo Albert Einstein, estás loco si deseas resultados diferentes, pero continúas haciendo lo mismo.
Hacer cosas diferentes, trae sus consecuencias, por lo que, antes de plantearte lograr cualquier objetivo, dedícate a analizar cómo podrías empezar a aceptar dichas consecuencias, y qué tan dispuesto estarías a vivir esa nueva vida.
Nada es perfecto, ni siquiera una vida llena de éxitos y triunfos. Tus sueños hechos realidad, pueden tener altibajos. Incluso las personas más ricas, exitosas y felices, viven momentos de tristeza (y algunos pocos, de depresión).
No pienses que existe una vida perfecta libre de todo componente de imperfección, sin embargo, tampoco te detengas por ello. Comprende que incluso a pesar de esas dificultades, es posible disfrutar de este mundo y sus bondades.