¿Deberías Hablar De Tus Metas?
Autor: Sebas Celis
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A lo mejor en algún momento alguien te ha hablado de la importancia de hablar de tus metas…
…de compartirlas con alguien para tener algo de «presión social».
Ya que si nadie sabe cuáles son nuestros objetivos, da igual si fracasamos en ellos.
No nos vamos a sentir mal, y será más fácil encontrar excusas y justificaciones por las cuales no lo logramos…
…a diferencia de tener que explicarle a alguien qué fue lo que pasó.
Sin embargo, hablar de tus metas con cualquier persona, no necesariamente es la mejor idea.
Así que, vamos a analizar el tema desde todos sus ángulos.
El apoyo social es una de las mejores maneras de asegurar que mantengas tu motivación y que tomes acción camino a tus metas.
Sin embargo, a veces nuestros grupos sociales, no son grupos de apoyo, sino de tropiezos, dudas y críticas.
Por lo tanto, es fundamental reconocer justamente si vale la pena hablar de tus metas con una persona, o no.
Casos En Los Cuales NO Es Bueno Hablar De Tus Metas
1. Cuando Las Personas Piensan Que No Vas A Lograrlo
Simplemente cuando hablamos de nuestras metas con personas que piensan que es una mala idea lograrlas.
O con gente que considera que es mejor dedicarse a otra cosa, que no es posible lograr el éxito en ese sentido.
Muchas de esas personas, en algún momento lo intentaron o tuvieron la esperanza de lograr esa meta, y fracasaron.
Por lo tanto, para no sentirse mal con ellos mismos y para no pensar que son unos fracasados…
…no quieren que otras personas logren esas metas y les demuestren que si es posible, que otros lo lograron y ellos no.
Entonces su misión (inconscientemente), aún con las mejores intensiones del mundo, será tratar de impedirle a otros que lo logre.
Esto a través de excusas como: «no quiero que te sientas decepcionado», «es muy difícil», «es imposible», «yo ya lo intenté», etc.
Lo cual podrá terminar por desmotivarte y detenerte en tu camino hacia el éxito.
2. Cuando Tu Mente Cree Que Está Tomando Acción Con Hablar De Las Metas
Este es un efecto psicológico muy curioso que a veces ocurre en las personas.
Se trata de que, cuando empiezan a hablar de cuáles son sus objetivos, incluso con personas que los apoyan…
…su mente piensa que ya están tomando acción, que ese es su primer paso, que ya empezaron el camino.
Y la verdad es que no han hecho nada hasta ahora, más que comentarle a alguien su meta.
Entonces, en vez de hablar, y hablar… Qué mejor que demostrar a través de acciones y resultados lo que se quiere conseguir.
Por lo tanto, es importante detectar esos casos en los que no es necesario hablar, sino hacer.
Porque con hablar no avanzas, y no tomas acción, a diferencia de moviéndote hacia eso.
3. Cuando A La Otra Persona No Le Importa
Es sencillo… Puede que des con alguien a quien sencillamente no le importen tus metas.
Probablemente porque anda tan ocupado en sus propios asuntos, que se le olvida siquiera preguntarte cómo te fue, qué pasó…
Y no es de culparlos, simplemente todos tenemos una vida con nuestras propias situaciones, cosas pendientes, etc.
Lo que para muchos impide brindar apoyo a otros, porque con sus propios asuntos es suficiente.
El problema es cuando eso contribuye a que tú mismo te olvides de tus metas.
Empiezas a creer inconscientemente que tus metas tampoco son tu asunto, y que hay cosas a lo mejor más importantes…
…lo cual es totalmente equivocado, porque deberían ser tu prioridad.
4. Cuando La Persona Significa Una Acusación, En Vez De Un Apoyo
Esto ocurre cuando las personas con quienes quieres hablar de tus metas, se enfocan en cuándo vas a lograrlo, y no en el proceso.
Es decir, cada que los ves, te preguntan: «¿Ya lo lograste?, veo que va siendo tiempo…».
Pero no preguntan cómo vas, qué dificultades has tenido, si necesitas ayuda, cuál es el proceso, si algo salió mal, etc.
No son un apoyo de ninguna manera, porque incluso con sus reclamos de si lo lograste, logran hacerte es sentir mal…
…y empiezas a pensar: «Que pena yo comprometiéndome, y no salir con nada, porque voy súper lento».
Entonces a este tipo de personas, realmente no es necesario tenerlas en nuestra vida.
Porque si en algún momento compartimos nuestros objetivos, es para recibir apoyo y algo de ayuda, no regaños o críticas.
Casos En Los Cuales SI Es Bueno Hablar De Tus Metas
Ahora si, sabiendo los casos en los que no es necesario hablar de tus metas, pasemos a los que sí…
1. Mastermind
En un Mastermind se cuenta con un grupo de apoyo, en donde el éxito de un grupo, es mayor a la suma de los éxitos individuales.
Aquí no sólo es útil, sino súper recomendado hacerlo…
…de manera que haya, no una presión social, sino un apoyo social con el que, entre todos, lleguen más fácil y rápido al éxito.
Si quieres saber qué es un Mastermind y cómo funciona, mira aquí: La Importancia De Estar En Un Mastermind
2. Con Tu Pareja
Hay muchas familias que tienen secretos por todas partes…
…que el esposo está haciendo algo de lo que la esposa ni está enterada.
Obviamente esta falta de comunicación, en ocasiones lleva al desastre.
Entonces, ya que tu pareja es una persona en la que decidiste confiar, que le hables de cada una de tus metas y objetivos.
Y sobre todo, que te brinde el apoyo y acompañamiento para lograrlas, porque de lo contrario, va a ser muy difícil que los dos progresen como pareja.
No significa que los dos deban ir tras las mismas metas, sino que se apoyen mutuamente para lograr sus propios sueños.
3. Con Los Que Entiendan Tus Motivaciones
Sencillamente hay personas que no saben por qué te planteas algunas metas.
Pero si esas personas son capaces de entenderte, ponerse en tu lugar, y comprender qué es lo que te motiva a conseguir esos objetivos…
…lo más seguro es que te apoyen, porque al entender cuáles son tus motivaciones, hace que vean exactamente los porqués.
Y cuando uno sabe los porqués, es más fácil brindar el apoyo correcto.
Por ejemplo, justificando ciertas acciones y aceptando el hecho de que uno esté obsesionado con sus metas.
Escuchándonos cuando hablamos de nuestras metas todo el tiempo, o cuando dejamos de ir a una reunión por trabajar en ellas, etc.
Si lastimosamente no contamos con algunos de estos factores en los que SI se hace bueno hablar de las metas…
…es preferible no contarle a nadie sobre ellas.
Y más bien, hacer un esfuerzo súper grande por comprometernos con nosotros mismo por lograrlas a toda costa.
- Sin que se te olviden
- Anotándolas
- Realizando un seguimiento
- Analizando
- Aprendiendo de tus propios errores
- Siendo tú mismo el que te cuestiones qué pasó
- Buscando las herramientas para lograrlo
- etc.
Espero que de la misma manera, sepas tú mismo ser un apoyo para los que te rodean.
Y que si alguien de tu círculo social lee este artículo, te pueda calificar entre las personas con las que SI puede compartir sus metas.
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