No Importa El Tamaño De Tus Problemas
Autor: Sebas Celis
No Importa El Tamaño De Tus Problemas
Muchas personas me dicen…
«Si yo tuviera más dinero, mis problemas se acabarían».
Permíteme decirlo de una vez por todas: ¡Eso es una gran mentira!
Si esto es algo en lo que has creído, entonces es necesario trabajar en ello para resolverlo.
Créeme, he estado ambos bandos, y los problemas de las personas abundantes, hacen ver los problemas de la gente pobre, bastante pequeños en comparación.
La diferencia real, es que la gente rica y que disfruta un gran bienestar gracias a la abundancia en la que viven, tienen capacidades que superan en tamaño a sus problemas.
El mismo problema, para dos personas de diferentes capacidades, tiene diferentes tamaños. La idea es que aumentes tus capacidades al punto en que tus problemas parezcan pequeños.
El tamaño del problema nunca ha importando… Lo que siempre ha importado (y seguirá teniendo importancia) es tu tamaño. El tamaño de tus capacidades.
Antes de continuar, quiero recorodarte algo: Sé gentil contigo mismo.
Si llevas un buen tiempo leyendo mi blog, entonces has estado aprendiendo e implantando nuevos hábitos mentales… Es posible que de vez en cuando caigas en tus viejos hábitos, y eso está bien.
De hecho, si te pillas a ti mismo volviendo a los hábitos o comportamientos negativos que tenías en el pasado, es grandioso. Felicítate a ti mismo por detectarlo… No te imaginas la cantidad de personas que caen en lo mismo a diario y ni siquiera se dan cuenta.
Esta es una buena señal de que tu mente consciente está reprogramando y creando nuevos caminos neuronales en tu cerebro para ayudarte en tu búsqueda del éxito.
Los conceptos que estás aprendiendo son simples, pero profundos, y es imperativo que tomes acción para que surtan efecto en ti. Sin embargo, comprende que ningún cambio serio y trascendental se da de la noche a la mañana.
Volviendo al tema, ¿Qué significa en términos prácticos «Ser más grande que los problemas»?
Primero, convertirse en una persona rica y abundante, no es tarea sencilla… No es como un simple paseo en el parque. El camino está lleno de obstáculos, caidas y desvíos.
Y esta, amigo mío, es la principal razón por la cual las personas deciden no irse por el camino de la creación de riqueza.
Simplemente, es demasiado lío para ellos.
La gente pobre, se mantiene pobre justamente porque hace TODO lo posible, para evitar los problemas. Y la ironía es que mientras más evitan los problemas, se acercan al problema más grande de todos: La miseria.
¿Por qué? porque adquirir el hábito de resolver problemas, y tener que pasar por situaciones desafiantes te moldea, y te hace una mejor persona. Si evitas eso, siempre te quedarás estancado en el mismo lugar.
La clave para el éxito no es esconderte de tus problemas, es crecer y volverte más fuerte que ellos para que así, parezcan pequeños, y puedas resolverlos con inteligencia.
Es por eso que la gente exitosa (y no necesariamente hablando de éxito financiero) enfrenta sus problemas de lleno, y los conquistan por completo.
Lo importante es superar los miedos, y cualquier tendencia a pensar en términos de sus problemas.
¿En vez de eso? Enfocarse en sus metas y objetivos.
Este es un buen ejemplo de cómo el mundo exterior es tan sólo un reflejo de tu mundo interior. La gente rica se ha vuelto rica porque primero tuvo abundancia en su mente, no en su cuenta bancaria.
Si vas a crear cambios permanentes en tu mundo exterior (entorno) — Incluyendo tu sitaución financiera — primero deja de enfocarte en tus problemas (y su tamaño) y empieza a dedicarle tu tiempo y pasión a tu propio crecimiento.
Un Ejemplo Sencillo:
Digamos que eres una persona de Nivel 2 (en capacidad, tamaño o fuerza de carácter) y que estás tratando de solucionar un problema de Nivel 5.
¿Sería algo grande ante tu percepción? Por supuesto que sí, Sería Gigante.
Ahora, imagina que a través del Desarrollo Personal, creces hasta ser una persona de Nivel 10…
¿Qué pasó con el problema?
Ya no es un problema grande. Ni siquiera un problema pequeño. Es posible que ya no sea siquiera un problema.
No es algo que te deje sin aliento, es simplemente una tarea más, como cepillarse los dientes.
Debes entender que siempre tienes alternativas. Puedes lamentarte por tus problemas, o trabajar en la solución, y posteriormente dejar todo de una manera tal, que el problema no ocurra de nuevo (o se solucione fácilmente).
En vez de quejarte por tus dificultades, aprende a ser un maestro en superarlos.
Déjame preguntarte: Si haces eso ¿Qué puede detenerte en tu camino al éxito?
La respuesta es: ¡NADA!
Te conviertes en una persona imparable. Y una persona imparable, tiene Todas las alternativas a mano.
Esto requiere práctica y por supuesto, mucho coraje. Nadie dijo que sería fácil. Sin embargo, como casi todo en la vida, es cuestión de crear el hábito y luego repetirlo muchas veces.
¿El resultado? Poco a poco tu vida irá mejorando, irás creciendo como persona y los problemas cada vez parecerán más pequeños y fáciles de resolver.
Y lo mejor de todo: Te harás rico en el proceso. ¿Qué puede ser mejor que eso?
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