Realmente No Importa Lo Que Hagas
Realmente No Importa Lo Que Hagas
En nuestra búsqueda por crear abundancia y riqueza, eventualmente nos encontraremos con mentalidades limitantes en otras personas y en nosotros mismos que nos harán preguntarnos si efectivamente ser ricos dependerá de las circunstancias específicas de cada persona.
Es decir, llegará un momento en nuestro camino, en el que tenderemos a pensar, que los que son ricos ahora, lo son porque han estado siempre en la posición correcta y han contado con algo de suerte.
En otras palabras, podemos llegar a pensar que los ricos son ricos porque han hecho ciertas cosas específicas que nosotros no hemos hecho.
Muchos incluso van mucho más allá de esta mentalidad limitante, y afirman que los ricos han construido su fortuna, a partir de ciertos negocios adecuados, o ciertos momentos de la historia adecuados.
Pero se extienden en afirmar que para ellos es diferente, que para ellos el negocio en el que se encuentran no les permite crear riqueza, y menos estos tiempos tan difíciles.
¿Te suena conocida esta excusa?
Si, es aquella que siempre busca justificar la falta de dinero propia, con las buenas oportunidades que se le han presentado a otros y que han sabido aprovechar.
Pero ¿Sabes? Mi objetivo de hoy no es más que el de decirte que estás completamente equivocado si piensas de esa manera.
Es decir ¿En serio crees que no puedes ser rico por la situación en la que te encuentras ahora?
Sin importar lo que hagas, sin importar tu negocio, sin importar tus gustos, tus pasiones, ¡e incluso tu conocimiento!, puedes hacerte rico perfectamente.
No depende de tu situación y como vimos anteriormente, no depende tampoco de tu ubicación geográfica. No es excusa válida tampoco decir que no puedes ser rico porque te encuentras en un país subdesarrollado, donde no hay empleo y el salario mínimo no alcanza para llegar a fin de mes.
Estas son excusas muy comunes en nosotros mismos, y provienen de nuestra necesidad por no aceptar culpabilidad o responsabilidad por la situación actual, sobre todo cuando esta situación podría ser mucho mejor.
Piénsalo. Si eres pobre o de clase media ahora, eso podría mejorar y podría efectivamente ser diferente… si no es diferente ¡Es tu culpa!.
Nadie más que tú ha sido el responsable de llevarte a tu situación actual, ni siquiera el gobierno… de hecho el gobierno es el que menos tiene la culpa de tu pobreza. El gobierno, si bien puede ser una entidad sobre la que tengamos cierto elemento de opinión, es un gigante que difícilmente llegaremos a dominar en el tiempo.
Y realmente, en vez de gastar tiempo y energía en pensar cambiar los gobiernos de hoy, considero mucho más saludable ayudar a las personas a descubrir caminos que les permitan avanzar independientemente de las situaciones.
No importa si la economía está alta o baja. Si estamos en depresión o si llegó la crisis. Podemos ser ricos y lo seremos en la medida en que nos desconectemos de tanto distractor de hoy en día.
Lo que menos le preocupa a los ricos es la situación del país. Muchos ni siquiera ven ten televisión y no saben nada de cómo van las cuestiones monetarias nacionales. Es algo externo, algo que realmente no debería afectarnos.
En mi caso, puedo dar fe de que desde que me encuentro en el camino del emprendimiento, nunca mis ingresos se han visto afectados por ninguna decisión del gobierno, e incluso cuando muchas de las tendencias económicas nacionales dictan crisis, he tenido mis mejores éxitos en cuestiones de dinero.
Entonces, quiero que grabes en tu mente algo muy importante: NO IMPORTA LO QUE HAGAS.
No importa si eres abogado, si eres ingeniero, si eres ama de casa, o si eres estudiante. Tampoco importa si tienes 50 años, si tienes 30 o si tienes 15. No importa nada más… que simplemente tu mentalidad.
Tu mentalidad puede superar cualquier crisis, puede crear ideas de negocio en la adversidad económica, puede generar valor y beneficios para otros y obtener remuneración a cambio, puede llevarte a desarrollar tu máximo potencial en la vida y a lograr tu autodescubrimiento y autorrealización personal.
Tu mentalidad también puede hundirte en deudas, hacerte gastar más de lo normal, descuidar tus finanzas y llevarte a un estado de depresión, pobreza y estrés.
¿No crees entonces que es un poco saludable prestarle atención a tu mentalidad? Si no tienes ahora el conocimiento necesario para generar ideas de negocios, puedes empezar a estudiar y es gratis con sólo tener acceso a Internet. Antes era mucho más difícil para las personas adquirir buenos conocimientos de calidad en temas de creación de abundancia.
Ahora ya nadie tiene excusa para decir que no puede ser rico por falta de información. La información está aquí. Siempre ha estado y cada vez es más abundante. Sólo hace falta que pongas de tu parte y que te comprometas con mejorar tu vida seriamente.
Nadie del gobierno vendrá en ningún momento a disculparse por tu situación económica y a brindarte su apoyo con cheques mensuales. Si quieres cheques mensuales ¡Trabaja por ellos!. Y ciertamente… no confundas «trabajar» con «conseguir un empleo». Son cosas muy diferentes, y realmente la segunda me parece una mala idea si lo que se quiere es crear riqueza.
Conseguir un empleo para crear riqueza, sería como crear una balsa para aprender a nadar. Es simplemente el camino equivocado, pero se nos vende la idea de que sirve para algo.
¿Sigues creyendo en esa obsoleta idea?