Tus Padres Te Hacen Pobre
Tus Padres Te Hacen Pobre
Hoy te pido mente abierta para este artículo 😉
Quiero mencionarte una de las causas principales del fracaso económico de las personas de hoy en día.
Antes que nada, debes notar que obviaré muchos elementos que también pueden influir en tu camino, que corresponden principalmente al ambiente exterior o al entorno.
Y que me centraré básicamente en lo que ocurre con el individuo como tal. Pues justo alrededor de su mente, es que se gesta toda la raíz del problema.
Bien, lo primero que hay que saber, es que cada vez más, los tiempos cambian agresivamente y mucho más en la era de la información.
Hace algún tiempo salimos de la era industrial y el paradigma laboral ha cambiado por completo, se ha redefinido en su totalidad el concepto de Éxito Profesional y se hace indispensable para el emprendedor de hoy, dejar de depender de otras personas.
Contar con absoluta independencia financiera, le permite a la persona moderna efectivamente dedicarse a lo que le gusta con pasión y mucho amor, y no sintiéndose obligado ni presionado a hacerlo por cuestiones de mera supervivencia.
La mente de nuestros padres, fue programada por la sociedad industrial, bajo la conceptología orientada a la búsqueda de la supervivencia, y las ideas de que un buen empleo era la mejor decisión.
Por tanto, nuestros padres aún consideran que ésta aproximación es válida, y tienden a enseñarnos lo que aprendieron (y con toda razón).
Ésto, por un lado… y por el otro, tenemos el hecho de que muy probablemente, nuestros padres no son ricos. Por tanto, a diferencia de algunos padres que si lo son, ellos no cuentan con las ideas y los conocimientos que cuentan los ricos, y por tanto no tienen la potestad para aconsejarnos en lo que respecta al área financiera, con buen éxito.
Ellos nos dirán qué es aquello que consideran mejor para nosotros, con base en sus perspectivas, sus experiencias y su visión del mundo (objetivamente, un poco atrasada).
Sin embargo, en la gran mayoría de los casos, pocos conocerán de la situación actual, de cómo han cambiado los tiempos y de la grave amenaza que supone seguirse basando en el modelo industrial de consecución de empleo.
La aceleración en la tecnología está impactando el mundo de los negocios y ninguno de nosotros está a salvo. Curiosamente, es aquí donde se producen las mejores oportunidades y esto se hace evidente cuando nos damos cuenta que ha aumentado el número de millonarios jóvenes desde hace algunos pocos años.
La primer razón entonces, para que nuestros padres nos hagan pobres, es que nos enseñen sus obsoletas pautas para vivir nuestra vida financiera, en un mundo totalmente nuevo.
Y la segunda, es que muchos de nosotros reconoceremos que están equivocados y querremos ser mejores que ellos, o demostrarles lo que valemos… cayendo en el resentimiento, la ira o el odio.
Usualmente escuchamos decir: «Nunca seré como ustedes… ¡Yo seré rico!» Y esto tampoco está bien.
Basar nuestra consecución de riqueza, en algo tan negativo como NO querer ser como alguien más, no tiene nada de productivo. Así que, básicamente de nuestros padres debemos aprender:
- Su valentía para enfrentarse a un mundo indudablemente más difícil que el nuestro.
- Su deseo por querer que vivamos bien (por eso nos enseñan y nos educan… aunque estén equivocados).
- Sus instintos de preservación y supervivencia, que nos tienen vivos hoy en día.
Pero también debemos poder discernir, aquellas cosas que podemos aprender, de aquellas que sencillamente no nos servirán, y dominar el arte de la comunicación para estar en armonía con ellos, siendo asertivos en nuestros deseos.
Finalmente, la conciencia es la clave de todo éxito. Si nos damos cuenta de que contamos con programaciones mentales obsoletas para el dinero y la abundancia, podemos cambiarlas y arreglarlas en el camino.
Y ¿Qué mejor que poder retribuirles a nuestros padres sus esfuerzos? 😉